¿Sabía usted que puede clonar a su mascota a distancia?

Aunque ya se han hecho más 1.000 clonaciones de perros en todo el mundo, en los Estados Unidos, Canadá, Japón, Rusia, India, China y Australia es donde más se ha utilizado los avances científicos para clonar a mascotas.

“El can es el animal más humanizado del planeta, al punto que convive con nosotros, duerme con nosotros, come con nosotros, lo llevamos de vacaciones y entiende el idioma del país en el que se lo cría. Si el amor es el mismo, esto no cambia nada. Esto no va contra nadie ni estamos reviviendo a nadie. Hacemos un gemelo del anterior y le damos la posibilidad a la familia de volver a tenerlo” Daniel Jacoby, director de BIOCAN.

Tras la muerte de Antony, su familia en Argentina pidió por encargo la clonación del perrito que los acompañó durante toda su vida. Sus familiares, quienes prefirieron mantener en reserva su identidad, se contactó con la firma argentina BIOCAN -única representante en América Latina de Sooam Biotech Research Foundation, exitoso laboratorio de Corea del Sur avalado por las más de mil clonaciones exitosas-; el proceso en cuestión es conocido como Somatic Cell Nuclear Transfer (SCNT) que consiste en la extracción del núcleo de una célula somática -en el caso de Antony, un pedazo de su piel-, que luego es transferida al óvulo al que se le suprime su material genético. El embrión logrado se introduce en una hembra que lo gesta en forma natural.

“No alteramos ningún ciclo natural de la vida. El can fallece, no es que nosotros lo resucitamos. Hacemos un proceso genético para que salga un can idéntico al anterior, con las mismas características físicas y la parte conductual se la da la misma familia que decidió la clonación”, detalla Daniel Jacoby, director de BIOCAN.

“Un veterinario se encarga de extraer el tejido epitelial (de la piel) y ese material lo llevamos al laboratorio de la Facultad de Agronomía para que se realice la reproducción celular. Una vez que las células están formadas se depositan en tubos con nitrógeno líquido, se las envía a Corea del Sur, donde se eligen las mejores células para iniciar el proceso de clonación. En total obtenemos 24 muestras; 18 las enviamos y las 6 restantes lo colocamos en un banco de células por cualquier inconveniente”, explica Jacoby.

“Estamos congelando muchas células de animales vivos. Algunos propietarios esperan que el animal muera para iniciar el procedimiento. Esto es peligroso porque en un porcentaje no se puede aislar material útil. Desde hace algún tiempo ofrecemos el servicio de preservación genética de mamíferos. La ventaja es que el material crio-preservado se mantiene en forma indefinida”, agrega al diario Clarín Daniel Salamone, director del Laboratorio Biotecnología Animal e Investigador principal de INPA-CONICET. El fue quien recibió la muestra de Antony.

La clonación de un perro tiene un costo que oscila entre los 60.000 y 100.000 dólares, obteniendo una mascota que tendrá el mismo tiempo de vida que cualquier otro animalito de sus características. “Las familias siguen todo el procedimiento en forma especial y a veces hasta los invitamos a Corea”, el lugar donde nace su nueva/vieja mascota. La entrega se hace en el país donde vive el cliente y el can viaja en vuelos especiales, de ser necesario, con jaulas presurizadas. “Hubo unos cuantos pedidos más a partir del caso de Antony. Llamaron para preguntar y sacarse dudas dueños de diversos tipos de perro, desde un pitbull hasta un caniche toy”, revela Jacoby, quien ya piensa en abrir el mercado a los gatos.

#revistamimascota

Fuente: El País

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